Caminata por la Vida y la Paz en la Familia
La caminata por la vida y la paz en la familia, es un evento multitudinario diocesano de movilización, que encabezaré como Pastor de esta Diócesis de Nezahualcóyotl.
Le he pedido a la Comisión Diocesana de Pastoral Familiar, Juventud y Laicos que sea quien coordine este evento, en comunión con la Pastoral de Multitudes, y culminemos con la celebración Eucarística, donde juntos pidamos a Dios por la vida, por la paz y por nuestras familias.
¿Por qué caminar juntos?
Queremos unirnos como hermanos que vivimos en esta diócesis de Nezahualcóyotl y con todos los hombres y mujeres de buena voluntad, profesen la religión que sea, para que juntos podamos encontrarnos y reconocernos como hermanos, como iguales, y manifestarnos públicamente que estamos a favor de los valores de la Vida, de la Paz y de la Familia.
¿Para qué hacer esta caminata?
Para agradecer, proteger, promover y celebrar los valores de la vida, de la paz y la familia.
Para fomentar la “cultura del encuentro” y que en la caminata participen las familias, y juntos anunciemos el Proyecto vivo de Dios para el Matrimonio, la Familia, la Vida y la Paz.
Por la Vida
Por la Paz
Por la Familia
Por la vida:
Manifestarnos a favor del derecho fundamental de toda persona humana a la vida.
Tenemos razones para valorar, proteger, promover y agradecer la vida como un gran regalo de Dios, que hay que aprender también a disfrutar. Por esto, cuando se está vivo, se hace fiesta y celebramos juntos la vida.
Queremos decir juntos un ¡Sí a la vida! a pesar de todo, y a pesar de la “cultura de muerte”. Sí a la fiesta por la vida, ¡sí a la alegría de vivir! Y un ¡sí a la vida con sentido!
Por la Paz:
Es evidente que nuestra sociedad necesita ser redimida de la violencia, y de todo aquello que daña a la comunidad, y por esto es urgente la organización y a la movilización como parte del pueblo de Dios, como un camino para participar activamente en la construcción de la paz.
Expresar de forma pública nuestra voluntad-derecho de vivir con paz en nuestros hogares y tranquilidad en nuestras calles, y que la paz regrese a nuestra diócesis.
Nuestra manifestación quiere ser propositiva, respetuosa y no reactiva de frente a nuestra situación particular. Donde se favorezca el diálogo y el respeto a la pluralidad y no se acentúe la confrontación, ni el antagonismo, sino todo aquello que nos hermana.
Necesitamos personas responsables que pongan su granito de arena en el trabajo por la paz, necesitamos políticos, gobernantes que estén dispuestos a entregar su vida en el esfuerzo cotidiano por superar las causas de la violencia.
La paz es un Don de Dios, pero también una tarea, compromiso y responsabilidad de todos.
Por la familia:
Queremos manifestar pública y pacíficamente nuestro apoyo a la Institución familiar, sólidamente constituida sobre la base de la unión matrimonial de un hombre y una mujer, como el camino natural para la procreación. Y como la base para la construcción y sostenimiento de cualquier sociedad que quiera la paz y que tenga futuro.
Todos los niños tienen derecho a un padre y a una madre.
Queremos cuidar y promover los valores del matrimonio y la familia.
Si la familia está mal, la sociedad está peor, siendo así la sociedad de hoy un reflejo fiel de nuestras familias.
“La familia no es el problema, es la solución”.
¿Quién está convocado?
Todos los sacerdotes, religiosos, religiosas, fieles laicos de nuestra diócesis, hombres y mujeres de buena voluntad, sean de la religión que sean.
Todos los movimientos diocesanos y grupos parroquiales de nuestras comunidades, (les pedimos que lleven sus estandartes).
Todos los jóvenes, estudiantes, maestros, académicos, directivos de universidades, políticos y empresarios, padres de familia, escuelas, comerciantes, etc.
Los médicos y agentes de salud que se están a favor de la vida. Invitamos particularmente a las madres embarazadas, como expresión de amor por la vida.
Los profesionistas y trabajadores de nuestra diócesis.
Los niños del catecismo y sus papás.
Todas nuestras familias en general.
¡Unamos voluntades y participemos juntos,
orando por la vida, por la paz y por nuestras familias!